Lorena Belmar Currin. Pedagoga. Pontificia Universidad Católica de Chile. Licenciada en Educación, Universidad Austral de Chile. Magíster en Educación mención en Gestión Inclusiva, Universidad Santo Tomás. Fundadora de la Asociación de Profesores de Inglés. Araucanía
“Instruye al niño en su camino, y aun cuando fuere viejo , no se apartará de el.”
En Chile, la Constitución Política de la República de Chile, en el Cap. I Art 1º menciona “La familia es el núcleo fundamental de la sociedad” y en Cap III – Art 10 se ratifica que “Los padres tienen el derecho preferente y el deber de educar a sus hijos”. La familia como núcleo social debe poseer el tiempo necesario para la comunicación, el trabajo, las actividades recreativas y los espacios de convivencia. Dentro de este entorno se educa y se fortalecen los lazos y aprendizajes básicos para interactuar desde sus primeros años. Los Padres proveen lo necesario para el desarrollo integral de los hijos, buscan oportunidades de aprendizaje y potencian los talentos, les acompañan en los vaivenes de la vida aportando seguridad amor y protección , le dan a conocer codigos sociales para discernir correctamente.
Para que la familia cumpla la misión de educar y logre éxito en un aprendizaje de ensayo-error , el Estado provee educación formal en la Red de Instituciones Educativas a través del país, donde los ciudadanos deben responder con actitudes aprendidas dentro del contexto familia tales como : respeto, esfuerzo, motivación, autodominio y responsabilidad en función de potenciar su desarrollo y lograr las competencias necesarias para desenvolverse exitosamente en diferentes entornos culturales y la educación alcance su fin último.
Hoy en una sociedad demandante, la responsabilidad de educar no se limita a quienes reciben un diploma oficial como docentes. Los Padres son y serán los primeros maestros y uno de los factores más influyentes en la educación de los hijos , y es el ejemplo de los padres lo que consolida la formacion : “la palabra no provoca efecto si no hace práctica”, los hijos aprenden lo que viven y lo que ven. Como Padres tienen la responsabilidad de educar a sus hijos y esta tarea no la pueden delegar en una organización educativa o considerarla como garantía estatal. Como Padres deben entregar amor, ser orientadores, consejeros, compañeros de tareas y juegos y supervisor del accionar de sus hijos.
Los Padres a lo largo de la vida , tienen la grandiosa y noble oportunidad para educar y formar a sus propios hijos, esto requiere de un esfuerzo diligente por cumplir esta tarea como una obra de amor y gran oportunidad para concretar exitosa y felizmente su proyecto familiar .