300 millones de pesos gastó el Mineduc en propaganda para intentar convencer de la reapertura de escuelas sin invertir en infra-estructura ni medidas de protección relevantes. El corto publicitario utiliza una música pegagosa y sugiere que cantando y estudiando podemos derrotar al coronavirus. Pero más allá del ridículo de la medida, ¿Cuáles han sido los elementos centrales del Ministerio durante la Pandemia? ¿Hacia dónde va con su proyecto de apertura de escuelas y liceos sin inversión relevante?
La improvisación inicial
Ya describimos con más detalles los primeros momentos de la política del Mineduc en otra publicación. Allí decíamos que El Ministerio de Educación mantuvo una política de inspiración neoliberal basada en mantener andando la maquinaria del sistema educativo, asumió un rol bizarro de resguardo de aprendizajes y dejó en segundo plano el cuidado de las comunidades educativas. Una de las causas de la improvisación la atribuimos a la falta de pensamiento prospectivo y equipos especializados, lo que generó una suspensión de clases tardía, anticipada por los Alcaldes ante un ministerio dubitativo. El ministerio asumió un discurso de resguardar aprendizajes, mantener la alimentación y entregó recomendaciones con un profundo desconocimiento de las estructuras educativas decadentes de muchas escuelas públicas, abandonadas para facilitar la expansión a la educación privada y privada-subvencionada. Se intentó también reforzar la educación online, en un primer momento, mediante una asociación con el mundo empresarial para la teleducación y la oferta de contenidos en línea y se intentó reducir la brecha digital de larga data en un par de meses entregando 122.000 computadores.
También desarrolló un tema de educación emocional en pandemia en un momento extraño, pues estaban todos los estudiantes en casa, con profesoras y profesores haciendo lo posible por mantener una formación a distancia, al final casi todo el mundo se olvidó. En este afán por defender la industria de la medición educativa, durante varios meses el ministerio asumió el rol de defensa del SIMCE y de la Evaluación Docente, obstaculizando una lucha política que costó tiempo y esfuerzos y desplazó de la agenda temas de seguridad.
Y para agregar un eslabón más a la cadena de movimientos erráticos del MINEDUC, observamos también el fallido intento de regreso a la normalidad nociva y el retorno (in)seguro, que nadie obedeció, a mediados de año, pero que es el germen de lo que hoy en día el ministerio llama Abrir las escuelas Paso a Paso o la campaña Sigamos Aprendiendo.
El Ministerio productor de contenidos y plataformas en Pandemia: política de educación desde las nubes
En el último tiempo el ministerio se ha centrado en producir o curar contenidos o en crear plataformas para entregar contenidos. También organiza a tontas y a locas programas de Radio, un canal educativo pero muy aburrido, cargado de una visión de la infancia muy conservadora. ¿Qué contenidos y plataformas? Muchas, algunas de ellas que se superponen, según la propia web del plan sigamos aprendiendo, encontramos:
Aprendo en Línea
Aprendo TV
Biblioteca Escolar Digital
Aprendo en Casa
TV Educa Chile
Conferencias en Línea
Asesoría Personalizada para Escuelas
Textos Escolares
El plan de Lectoescritura digital
Estamos a tiempo
Y Aprendo FM
Al parecer noy autoevaluación ni autocrítica a la cabeza del ministerio. El Ministro Figueroa, abogado vinculado a la educación superior privada, explica con orgullo y en inglés el éxito chileno en la gestión de la crisis educativa antes la OCDE. Resumiendo, las acciones tomadas por el Ministerio podrían denominarse políticas de educación desde las nubes o políticas de educación desde la marginalidad de los medios, que flotan en torno a la escuela, pero que no logran integrarse al proceso educativo y ni se traducen en cambios y mejoras en infraestructuras, ni en condiciones de trabajo ni mejoras en seguridad. Y que no necesariamente trabajan conjuntamente con la escuela, pues no hay espacios de co-construcción ni coordinación con los docente, por ende, las políticas del MINEDUC no se sincronizan con la enseñanza.
Por un regreso inseguro y barato
La verdad creo que nadie discute que tarde o temprano se volverá a la escuela. El problema es que el Ministerio quiere un retorno inmediato y que el retorno sea a costo cero, sin inversión en infraestructuras para la seguridad ni en medidas relevantes, a menos que te llames Liceo Bicentenario: “Este ha sido el año más crítico que ha vivido la educación chilena. La partida 09 del presupuesto de la Nación (que es la que asigna las platas al Ministerio de Educación) viene un 0,2% más escuálida que la de 2020, afectando principalmente las escuelas de adultos, las de reingreso educativo y las regulares del ‘Índice de Vulnerabilidad Escolar alto’, que son las que se ocupan de estos niños, niñas y jóvenes extremadamente vulnerables, las que recibirán un 10% menos de presupuesto que el que tuvieron durante este año”, indicó la directora de la Fundación Súmate del Hogar de Cristo, Liliana Cortés.
En este contexto de pandemia gestionada por el neoliberalismo en el gobierno, la postura de las y los docentes, como garantes de una forma de aprender con seguridad, sería la de continuar presionando por todos los medios posibles, como la hecho hasta ahora el colegio de profesores, por un regreso a clases con medidas serias y políticas de mejoramiento relevantes, como disminuir la ratio de estudiantes por aula, como mínimo, lo que implica contratar más personal docente para disminuir el tamaño de las clases y evitar los hacinamientos en las aulas que propician la expansión del virus. Esto implica elevar las subvenciones a corto plazo para mejorar las infraestructuras saturadas, como baños, adquirir distribuidores de alcohol gel y dotar de mascarillas a docentes y estudiantes. Y sin contar, que en algunas grandes urbes, como Santiago, los problemas de hacinamiento en el transporte público no garantizan un trayecto a clases libre de contagio, a menos que tengas un auto privado. Es decir, hay muchas cuestiones que pensar y financiar antes de volver a clases.